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jueves, enero 31, 2013

LOS SOBRES DE BÁRCENAS








Estimados españoles:


Como representante de la A.S.E, (Asociación de Sobres Españoles) y, ante las noticias referentes a  la entrega de sobres con dinero negro a dirigentes del Partido Popular, quiero manifestar:

Que el hecho de que algunos de nuestros miembros hayan sido utilizados para transportar dinero corrupto dentro de sus entrañas, no debe empañar el trabajo de todos los millones de asociados que nos dedicamos honradamente a nuestra labor social, de transmitir noticias, cartas de amor y publicidad.

Que nos entristece que estos desgraciados y minoritarios hechos puedan echar por tierra tantos siglos de abnegada actividad en favor de la comunicación a distancia entre los humanos.

Que esperamos que este acontecimiento no acabe definitivamente con nuestro trabajo ya suficientemente afectado por las nuevas tecnologías: internet, correo electrónico, SMS y WhatsApp.

 Por  todo lo anterior hemos adoptado las siguientes medidas con carácter inmediato:

1/ Nos ofrecemos gratuitamente a cualquier español que decida usarnos para hacer llegar sus cartas de indignación a las sedes del PP o a cualquier medio de comunicación.

2/ Aplicaremos la objeción de conciencia ante las próximas citas electorales, al negarnos a servir de soporte de las papeletas  del Partido Popular.


Se despide con la esperanza de su comprensión y quedando a su disposición para cualquier aclaración,


                                              Sobre Apaisado

                                               Presidente de A.S.E.


lunes, enero 28, 2013

FEDERICO GARCIA LORCA -CASIDA DE LA MUJER TENDIDA







CASIDA DE LA MUJER TENDIDA

Verte desnuda es recordar la Tierra.
La Tierra lisa, limpia de caballos.
La Tierra sin un junco, forma pura
cerrada al porvenir: confín de plata.
Verte desnuda es comprender el ansia
de la lluvia que busca débil talle
o la fiebre del mar de inmenso rostro
sin encontrar la luz de su mejilla.
La sangre sonará por las alcobas
y vendrá con espada fulgurante,
pero tú no sabrás dónde se ocultan
el corazón de sapo o la violeta.
Tu vientre es una lucha de raíces,
tus labios son un alba sin contorno,
bajo las rosas tibias de la cama
los muertos gimen esperando turno.

Federico García Lorca

sábado, enero 26, 2013

EL RELOJ DE ARENA





Somos hormigas que pululamos dentro de un inabarcable reloj de arena. Exploradoras incansables, condenadas a caminar sobre el inestable árido. Nos emparejamos para evitar los enloquecedores ecos que produce la soledad dentro de la bóveda.

Observad cómo se filtran junto a los delicados granos de silicio, nuestros hijos. Si el día es claro y os tumbáis boca arriba, contemplareis el incesante traspaso de bebés hormiga a través del cuello del reloj.
Malgastamos nuestras vidas transportando la grava entre las mandíbulas en dirección a la cumbre de la duna. En su cúspide recibimos la lluvia de cristales y, extasiadas, nos dejamos enterrar en el ardiente maná. En el camino de regreso al nido me cruzo con una hormiga que asciende y, tras examinarla, compruebo que soy yo. Continúo la marcha agitando las antenas.

Sé que pasaré el invierno junto a mis compañeras, acurrucadas en un ovillo del que irán desprendiéndose algunos integrantes con el paso de las semanas.


Tememos el momento en el que caerá el último grano sobre nuestras cabezas. Cuando eso suceda, sabemos que El Relojero tomará entre sus dedos a la dama de cristal de fina cintura, e invertirá sus bóvedas.










miércoles, enero 23, 2013

Astor Piazzolla y Raúl Lavie - Balada Para un Loco


ENRIQUE VIII vs ANA BOLENA



Cuando Enrique VIII se enamoró de Ana Bolena, mandó hacer una silla cuyo respaldo decía: "El dueño de esta silla tiene derecho a un beso de cualquier dama que se siente aquí". Enrique sentó a Ana en la silla y la besó. Todos miraron entonces el hermoso cuello largo de color marfil de aquella mujer hermosa, y cuentan que, acaso premoritoriamente, un ingenio de aquella Corte susurró al oído de la dama: "Pobre cisne hermoso". Era la expresión profética de lo que andando el tiempo iba a suceder con ella, con una mujer que había brillado por encima de todas en la Corte inglesa, de la que se decía que los caballeros se disputaban el agua en que se había bañado: de hecho, llenaban las jarras de plata con ella y se la repartían en vasos para beberla, en sus días triunfales.


Anécdotas de la historia - Pancracio Celdrán

sábado, enero 19, 2013

Göttingen -Barbara- Subtitulada


EL VIAJE DE ANDRÉS




Andrés volcó la taza sobre la mesa, provocando que el café discurriera rápidamente por su superficie, llegando hasta el borde desde el que se precipitó sobre los pantalones de Ana. Así culminó con éxito la parte mecánica de su plan.

Proyectó su imaginación sobre el líquido que fluía libre, viéndose instantáneamente sumergido dentro. Mirase donde mirase, sólo veía el oscuro elemento. Notaba como se desplazaba a gran velocidad hacia el límite de la mesa. Ya no escuchaba las voces del camarero, ni las que emergían de la televisión, ni siquiera a Ana. Tan solo percibía los producidos por sus naturales chapoteos dentro del improvisado canal. Todo transcurría según lo programado.

El salto al vacío fue lo más emocionante;  tanto por la excitante sensación de peligro, como por la aproximación a su objetivo. El contacto con el tejido de algodón que conformaba sus pantalones vaqueros fue doloroso. La presión que ejercía el líquido al atravesar las hebras de la tela, impedía que Andrés traspasase esta última barrera con un mínimo control. Finalmente se coló entre dos hilos y llegó a la piel. Estaba viscosa y caliente por el efecto directo del café. Decidió arrastrarse hacia las ingles de Ana, a donde no había llegado la impregnación.

Ana se incorporó de la silla y comenzó a tirar de la pernera del pantalón en un vano intento de aislar su cuerpo del incómodo caudal. Algo parecido a un alud estuvo a punto de derribar a Andrés, si no hubiera sido porque consiguió aferrarse a unos restos de vello que habían sobrevivido a la última depilación de Ana.

Colgado, agitado y ansioso, Andrés acompañó el regreso de Ana a su casa. Soportó las maniobras con las que Ana se libró de los pringosos vaqueros. Recibió con placer el agua de la ducha y la espuma del jabón. Notaba la piel de su amada fresca y aromatizada, tanto que no pudo evitar frotar su cara contra ella. La besó.

Andrés agradeció que Ana se fuese a dormir temprano esa noche. 

martes, enero 15, 2013

EL COLLAR





Jaime le acaba de decir a Sonia que le gusta su collar. Jaime y Sonia se conocen desde que comenzaron la universidad. Los dos tienen un parecido sentido del humor, por lo que congeniaron desde el primer día. El tiempo ha ido moldeando una relación afectiva, intensa pero contenida, que no escapa a sus compañeros. Ahora, a escasos meses para licenciarse, ambos están inquietos. Saben que se les acaba el tiempo. Sonia conoce bien a Jaime y sabe que no entiende de ropa, ni de complementos. Jaime, sin levantarse, mira a Sonia que permanece de pie junto a él. Se ríen y se ven sonriendo. Parecen dos niños enamorados que se han quedado solos en una esquina del recreo. Sonia vuelve a su pupitre. Jaime a la realidad.

 
Los dos arrastran sendos noviazgos fuera de la universidad. Cuando charlan apenas hablan de sus parejas. Intentan mantenerlas fuera, como si supusieran un estorbo.

 
Jaime no se ha planteado dar el paso. Sonia tampoco. No está claro el motivo que les frena. Sonia no le rechazaría y Jaime lo sabe. Y también sabe que le haría el amor con delicadeza, durante horas, hasta caer agotados.

 
Sonia se pregunta qué sabor tendrán los labios de Jaime.

SABIDURÍA

El trabajo diario  Von Blaas


Antes de adquirir la sabiduría, corta madera y acarrea agua. Después de adquirirla, corta madera y acarrea agua.

Proverbio budista

domingo, enero 13, 2013

AL OTRO LADO DEL TÚNEL - JOSÉ MIGUEL GAONA



Aunque las Experiencias Cercanas a la Muerte, son un tema que ha intrigado desde siempre al hombre, fue en el año 1975 cuando el doctor Raymond Moody, sorprendió al mundo con su libro, Vida después de la vida. Han sido muchos los autores que a raiz del éxito de su publicación han seguido su estela.
El otro día adquirí un ensayo del Psiquiatra español José Miguel Gaona titulado: Al otro lado del túnel, en el que, treintaisiete años después, nos ofrece una obra densa, cargada de cientos de casos y en la que nos acerca todas las interpretaciones posibles; desde las más escépticas, hasta las que infieren que estas ECM son la antesala de nuestra supervivencia tras la muerte.
Os traigo a continuación el resumen que hace en el capítulo XXI, de una ECM tipo:

...Tuve un infarto (lo supe después) y perdí el conocimiento, pero es curioso, porque a pesar de tener los ojos cerrados lo veía todo y, lo que es más sorprendente, llegué a escuchar cómo el médico en la ambulancia le decía a otra persona (conductor o enfermero) que yo estaba muerto. En ese momento los sonidos ambientales comenzaron a apagarse, como cuando nos tapamos los oídos con las manos y un zumbido se apodera de la audición. Al mismo tiempo una fuerte luz blanca apareció en el centro de mi campo visual. La luz fue creciendo...¿o era yo el que me acercaba a ella a través de un túnel? En el mismo espacio temporal podía verme fuera de mi cuerpo. Yo seguía siendo yo mismo, pero mi cuerpo estaba "allí abajo", podía ver a los médicos sobre mí intentando resucitarme, incluso oía sus comentarios. La sensación era extraña pero llena de sosiego. Súbitamente, casi al final del túnel, veo a una persona. Al acercarme observo que la conozco (puede ser un abuelo, un familiar, una amistad íntima) y se dirige a mí haciéndome ver toda mi vida como en una película (en otros casos la persona se acerca a un personaje que irradia una fuerte luz blanca). Me piden que haga una valoración de mi vida. El personaje me indica que todavía no estoy preparado para dejar mi vida terrenal y que es importante que vuelva, otra vez, a mi cuerpo. La sensación de regreso fue desagradable, ya que me encontraba sumido en una intensa felicidad y en un gran bienestar. Involuntariamente acabé despertando dentro de mi cuerpo. El bienestar desapareció súbitamente y, fuertes dolores ( en este caso, los del infarto) saturaron mis sentidos. Estuve durante mucho tiempo sin contar todo a nadie para que no me tomaran por loco. Incluso los más allegados deconocían lo que habían vivido.

La experiencia de las ECM- Al otro lado del túnel (José Miguel Gaona)

sábado, enero 12, 2013

EL AUTOBÚS ARTICULADO



Esta tarde he viajado en un autobús que lloraba. Se trataba de un autobús urbano articulado. De esos que en su mitad tienen una especie de fuelle que les permite girar sin dificultad y cambiar de sentido en las intrincadas calles de la ciudad; sin renunciar a transportar un alto número de viajeros. De hecho creo que era precisamente en la articulación donde se generaba el llanto. El resto de pasajeros permanecían ajenos a esta experiencia sonora. Era un sollozo infantil, esto lo tengo bastante claro. Pero no era una rabieta; de ningún modo. Más bien parecía surgir del miedo o de la angustia, no del capricho. Obviamente se sofocaba inmediatamente al recuperar el autobús su verticalidad. Pero al doblarse volvía a manifestarse el terrorífico y desconsolado griterío. En ocasiones se podían distinguir varias voces infantiles formando un coro infernal. Voces blancas resistiéndose, pidiendo auxilio a los impávidos viajeros. En las paradas subían y bajaban pasajeros que pisaban la plataforma giratoria sin ser conscientes del dolor que encerraba. En más de una ocasión me dieron ganas de agarrarles por los hombros y zarandearles por su falta de empatía. Al fin llegué a mi destino. Al apearme no pude evitar mirar su marcha con lástima.  Me alegro de no vivir en un autobús articulado.

lunes, enero 07, 2013

QUISIERA



Quisiera sembrar un reguero de gritos
como migas de pan,
sobre la arena seca de una playa vacía.

Quisiera horadar surcos con el puntero de la memoria.

Quisiera notar bajo mis pies
la explosión de mis recuerdos enterrados.

domingo, enero 06, 2013

DÍA DE REYES




David contempla los regalos de reyes  con nerviosismo.  Le tiemblan las manos,  por lo que su madre que le tiene abrazado por detrás, le ayuda a desenvolverlos. Su padre les graba  con la cámara del móvil.  En Motril hace dos horas que salió el sol, el cielo está azul y el aire sopla con tanta timidez que apenas se nota.  
Menelik  siente también como los brazos de su madre, ahora dormida,  le rodean el cuello. La misma gaviota que hace treinta minutos sobrevolaba la casa de David, proyecta una sombra fugaz sobre la cara de Menelik.
Los papeles, de vistosos colores, aparecen desparramados por el suelo, las cajas reventadas y los regalos están siendo examinados por los legañosos ojos de David.

A Menelik el vaivén de las olas no le ayuda a coger el sueño.  El sol se va enseñoreando del firmamento y Menelik sabe que debe volver la cara. Si su madre estuviera despierta le pondría las manos en forma de visera para evitarle sus rayos.  A Menelik y a los otros diecisiete ocupantes de la barcaza, el color de la piel les protege de las quemaduras solares; pero no de la mezcla de gasóleo y salitre que parece querer cocinarles en vida.
David desayuna con sus padres en la cocina. Sabe que tardarán meses en volver a estar los tres juntos. Por lo menos hasta su cumpleaños.

Moroni, el de mayor edad, se incorpora y, en precario equilibrio, intenta llamar la atención de un barco naranja que se les acerca, aún diminuto.  Es la segunda embarcación que divisan en diez días. A la primera la evitaron.
El padre de David recibe una llamada. Recoge las llaves del coche y sale corriendo. En el último instante se para, llama a David, le besa y le dice que le quiere. David sonríe porque sabe que es cierto.

Menelik, su madre y Moroni ya han sido rescatados junto con el resto de los ocupantes de la patera y subidos al navío de Salvamento Marítimo.  Algunos pueden mantenerse erguidos, pero la mayoría son atendidos sobre la cubierta. Menelik nota un gran nerviosismo en los rostros de los hombres blancos que les asisten.

El padre de David espera, a pie de pasarela, a que desembarquen a los emigrantes. Le han avisado de que hay seis casos graves entre ellos. Pese a su experiencia como médico de urgencias, no se acostumbra a lo que llega en este tipo de servicios. Atiende primero al único niño del rescate. Efectúa una rápida comprobación de su estado y le hidrata con cuidado.
Menelik le mira agradecido y corre en busca de su madre.

sábado, enero 05, 2013

LA IGLESIA DE SAN MIGUEL Y LA CARA DEL DEMONIO







































Si observamos con detenimiento la portada de la iglesia zaragozana de San Miguel de los Navarros, encontramos algo que nos recuerda el típico humor socarrón de los aragoneses.

La escena representada es la del arcángel San Miguel luchando con el demonio y está cargada de movimiento, fuerza y equilibrio. Debemos esta escultura a Gregorio de Mesa, que la terminó a principios del siglo XVIII.

Pero en 1860, un rayo destrozó la cabeza del demonio (imaginemos lo que pasaría por la supersticiosa imaginación de los zaragozanos del siglo XIX).
Pues bien, se encargó la creación de la nueva cara del demonio, al escultor Félix Oroz.
Éste no tuvo mejor idea que la de inspirarse en el retrato de un antiguo compañero de estudios de los Escolapios y, en esas fechas, rector de la Universidad de Zaragoza: Don Jerónimo Borau.

Menos mal que don Jerónimo tenía otras iglesias para acudir a misa y evitar así  la mofa de sus conciudadanos.







jueves, enero 03, 2013

Philip Glass' Violin Concerto No 1. - Versión Saxo.


LAS OLAS - VIRGINIA WOOLF (1882-1941)




Amo,-dijo Susan- y odio. Sólo una cosa deseo. Mi mirada es dura. La mirada de Jinny se quiebra en cien mil luces. Los ojos de Rhoda son como esas pálidas flores a las que acuden las polillas al atardecer. Los tuyos crecen y rebosan pero nunca se quiebran. sin embargo estoy ya empeñada en mi búsqueda y mi propósito. Veo insectos en la hierba. Pese a que mi madre todavía me hace blancos calcetines de punto y me cose dobladillos en los delantales, y pese a que aún soy una niña, amo y odio-.
-Pero cuando estamos sentados cerca,-dijo Bernard,- tú y yo nos fundimos el uno en el otro gracias a las frases. Quedamos ribeteados de niebla. Formamos un territorio sin sustancia-.
-Veo el escarabajo,-dijo Susan.-Veo que es negro, veo que es verde. Estoy limitada a palabras sueltas. Pero tú puedes alejarte, te escapas, te elevas más alto, con las palabras y palabras en frases-.
-.Ahora,-dijo Bernard,-exploremos. Hay una casa blanca que yace entre los árboles. La casa yace ahí, mucho más bajo que nosotros. Nos hundiremos como nadadores, tocando el suelo con solo las puntas de los dedos de los pies. Nos hundiremos a través del aire verde de las hojas, Susan. Nos hudiremos mientras corremos. las olas nos cubren, las hojas de las hayas se reúnen sobre nuestras cabezas. Ahí está el reloj del establo con sus brillantes saetas doradas. Ahí están las llanuras y los picos de los tejados de la gran casa. Ahí está el mozo de cuadra produciendo metálicos sonidos en el patio con botas de caucho. Esto es Elvedon.


Fragmento de la novela Las olas de Virginia Woolf.

martes, enero 01, 2013

¿El tiempo es oro?



Me rebelo contra la vieja frase: el tiempo es oro.
No estoy de acuerdo en equiparar algo tan escaso, inseguro, e irremplazable, como es el tiempo del que dispone una persona, con el oro o su primo hermano, el dinero.
Acepto, eso sí, que todos necesitamos entregar una parte de nuestro tiempo a cambio de dinero. Pero decir por ello que el tiempo es oro, sería como decir que viajar es gasolina; o que soñar es un colchón; o que amar es un anillo; o que sonreir es un dentífrico.
Por eso, mi deseo para este año es que todos valoremos cada minuto de nuestro tiempo y lo depositemos en lo realmente importante: Viajar, soñar, amar y sonreir.