El otro día me llegó un sueño relatado por su
"protagonista". Me pareció tan interesante que
le pedí permiso para colgarlo en mi blog. Pese
a tener un carácter íntimo accedió a mi petición,
lo cual le agradezco profúndamente.
El sueño:
Caminaba por una calle muy larga , llena de árboles,
en un costado había diferentes casas muy antiguas.
Yo tenia un perro sujeto por una correa, de la que
tiraba con fuerza.Me detuve en la puerta de una casa
que tenia una escalera de mármol muy blanca, y con
barandas de madera muy lustradas. Subí. Llegué a
un descansillo. Volví a subir y di con una puerta con
unas cortinas de crochet, viejas y que hacía años habían
sido blancas. Tomé el picaporte y vi una salita, con una
mesa ovalada, cubierta con un pequeño mantel y un
centro de mesa. No sé de dónde, se hizo una pequeña
luz y, frente a mí, se presentó una vieja. Me asusté en
mi sueño , pero noté que mi perro no gruñó en absoluto.
A pesar de lo envejecido del rostro, reconocí a la madre
de mi padre a la que sólo vi en fotos, ya que murió
siendo mi padre un niño.Me quedé atonita y muy
asustada. Le pregunté que hacía aquí.
-Te vine a saludar y a pedir algo-me contestó- trata de
perdonar a mi hijo.
Yo no entendí nada pero ella me miraba muy sonriente.
Parecía muy plácida. Su tez muy blanca. Le pregunté por
qué no habia venido antes. Ella me contestó que no le
habian dejado.Que solo esta vez. Su peinado era el mismo
pero era más anciana.Me contemplaba con una bella
sonrisa constantemente.De repente detrás de ella se
abrió un larga puerta muy blanca y brillante . Se acercó
alguien y le dijo-vamos-.Y me volvió a repitir- perdónalo,
mi hijo se va a equivocar- y me tiró un beso y desapareció.
Yo me quedé sola con mi enorme perro negro que comenzó
a correr escaleras abajo. Salí caminando despacio . Llegué a
la calle, y caminé y caminé. Ví al perro en una esquina.
Él me vió, movió la cabeza, y se fue.
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